Y mis trazos amor mío son tu deleite…
Te gustan mis vientos de amor
los que nacen en el epicentro..
de mis deseos que se desnudan,
y afloran turgentes diciendo;
ámame que soy musa del sol
que te lleva a ser soplo de mi vida.
Fortunas de día..
y suspiros de luna,
que endulzan
mi piel en miel.
y tus alondras besando vesubios
y mi azorado pecho versando;
– te amo, te amo –
y acunas tus aposentos
en mi fragancia rosa..
la que nace reciproca..
y conversa en tus pupilas.
la que dibuja un “madre mía”
– en tu boca.
Con ese deseo
irrevocable, indomable,
que te llama a ser pan en mis manos,
que sacian hambre.
y a ti me consagro –
desfalleciendo fiel y dulce..
besando el latido de mi simiente
en el regazo que ya despierta…
y mece –
amapolas de labios rojos..
encendidos al compás de mi pecho,
y subo y tu me esperas
y bajo y tu te entregas.
Y mis trazos amor mío
son tu deleite.
Sueños cumplidos.. en ese junio soleado.
No sabía que pasaría en junio
sólo se que era nuestro encuentro.
No se si llamarlo cita?
porque era más; un Si de vida!
De mi vida a tus ojos..
de mis manos a tu pecho bueno.
Y de primavera vestí mis labios
así de sabor mas afrutado.
Y mi deseo fue besado
y con ello mis nupcias blancas.
Sueños cumplidos
en ese junio soleado.
Danza de amores
Olorosas sensaciones
Sintiendo que algo venía del cielo
pues sus ojos hablaban de milagros.
y solo pude besarle…
y acariciar sus manos.
Donde él me decía:
“Ay! mi chiquita que fortuna la mía
estoy frente a la mujer de mi vida”
Las flores de la vida.
Las flores de la vida
nacen como espigas
que quieren ser mecenas de oro
para llevar pensamientos carismáticos
llenos de bondad
en ese su baile
de humildad
dando su fragancia..
de ser.. y de ser..
ser esa vida que brota en cada alma
que desea ver quietud,
alegría y frescura,
en honor de llevar el corazón
prendido por el camino
ese camino que se narra
entre latido y latido,
mirada a mirada,
en el toque de tus manos
en esta mi mejilla que lozana te dice:
ven!
estoy aquí amore dulce,
bésame que muero por ser tu posado!
y así empecé a ver las flores contigo
en ese beso que nació al mirarme
al hablarme de amor
con tus gestos de amapolas
que tanto nos gustan
en esa Toscana
que parece que se para el tiempo..
por magia… por magia
para hacer eterno un atimo
que cambia el sentido de las palabras…
esas que mojan los ojos de agua
y ensalzan toques de estrellas
esas palabras que cambian
el rumbo de empezar a amar
en el canto del pecho,
en el seno de mi mano
dentro de tu corazón amatorio,
en esa flor que llamamos:
“no podía haber encontrado mayor sueño en la vida”…
Y en esa fragancia que como tu dices:
se vuelve epopeya y narra:
“un estar conmigo es una emoción continua..”
y yo me derrito y me siento como ese abrazo
que siempre besa fortuna…
Esas flores de la vida…
que son como esos besos sagrados,
que llevan pleitesía y mis pensamientos,
en cada pausa que respiro tu nombre..
oh! y vuela tu alma hacia mi…
e impregna mi aliento de todo el rocío,
que versan esos pétalos de rumbos unidos,
donde la distancia se hace presencia.
Esa presencia que se viste de amor
que abre la ventana a ser vida!
a ser sueños y esa letra que tiembla!
de pasiones azucaradas en mi boca.
Esas flores de la vida
como ternura de un; buenos días
como cálido tapiz de prados
de tus ojos en mis ojos
como azaleas que llenan mi cintura
cuando besas mis contornos
como premio a tu boca
tu boca sensual
ese premio
que evade desolaciones
que encumbra organzas
que necesitamos saborear
pararnos… y saborear..
y sentir el tiempo
que nos invita a esa quietud
de darnos cuenta que somos felices
como en este momento que lo somos
y pensamos en sensaciones que laten
y ese pensamiento se transforma
en un recuerdo vivido, saboreado,
cautivo como rubor en tus labios
en esta sensación de amor .
Y vemos en todo
flores,
en todo
la magnitud del verso,
magnitud de Estar ,
en el tiempo que Dios nos ofrece…
de Ser Poesía…..
Y así tu Palabra se convierte
en poesía para mi alma
y evoca la vivencia mas exacta
que me lleva a ser sendero cierto
donde se purifican mis versos
y crece humildad en mi corazón.
Esa sensación de que todo lo exquisito
se gesta en la serenidad de ser mas amor
oyente de Tu latido, oyente de tu silencio,
oyente de tu sonrisa que se desliza callada
dando vida a mi alma en esa suavidad perfecta.
Tu palabra que está llena de esas flores de la vida..
cuando tomas mis manos y solo me dices:
Escucha mi bien; – Esto es estar enamorado –
Y recuerdo ese momento
como el cambio de mi vida.
Y me vestí de pétalos
porque sentía
que llegaban esas tus manos
que elevan efluvios
que mistifican mis adentros,
y siguen como antaño
enamoradas y sintiendo..
prendidas en el tiempo
en estas flores perpetuas
simiente de cada fruto de amor.
Simiente de algo que lleva baile
que lleva respiro, que lleva dulcineas
como manzana fresca, que nace en retoños
que secuestra nuestro corazón
al mismo tiempo que vemos su carita
de Rosa amada.
No pude elegir mejor fortuna
que ser en ti y tu en mi
No pude elegir mejor quietud
tú el centro de mis silencios
más significativos
esos que arrullan el alma
la vida y todas estas maravillosas
sensaciones en magia de flores.
Como diría Hernri Matisse:
“Siempre hay flores para el que desea verlas “
Y por eso te amo porque veo contigo cada bello detalle de la vida y su fragancia.
Gracias por ser mi libertad de ser buena persona
y ese Testigo de Fe de vida donde se engendra siempre bondad en flor.